
Me dijo que era obsesivo y me obsesioné con ello…
Catorce años y medio después regresé a ese mismo lugar
de esos lugares que no cambian cuando uno no está
que te violentan y atormentan para que dejes de ser el mismo miserable
que se congelan quietos en un súbito déjà vu
en los que cada acaecimiento es un circo que dura lo que cualquier viaje en ascensor
en el más irrespirable y público baño vertical
Me encanta conversar conmigo de esas decisiones que dejaré pendientes para siempre
a veces solo quisiera que me sigas la corriente en la conversación
saldré de mi zona de confort tres minutos solo a verte
desde el vagón me verás pasar a la velocidad de un árbol
y sin saber cómo te sorprenderé con abundantes recuerdos
apesadumbrados contenedores repletos de ilícita nostalgia
licuar con la boca para después herméticamente abandonar
seres que antes fueron vivos
celebrar con tu exclusividad un evento
que lo ven cientos de millones de personas contigo
no existe nadie más
como cuando te corriges y hablas para ti con el espejo
repitiéndotelo las veces que sea necesario
te quedas porque no te puedes ir de ti
la fiesta de los sonidos más highly inappropriate que puedas imaginar
mesa llena de sobras que a otros les falta
esperando pacientemente el fin de las escenas de transición
donde no ocurre absolutamente nada excepto el clímax
insistir e insistir con una palabra que casi no calza en frase alguna
¿sabías que ya no te quedan trenes por perder?
asegúrate antes de dormir que mañana hay un mañana esperándote
confortarte con saber que no recuerdas ciertas cosas que nunca quisiste saber
el mundo de mierda que le dejamos a la siguiente generación
versus el mundo de mierda que nos dejó la generación anterior
todo el vómito que tanto nos costó ocultar
la verborragia de madurar en vivo y quedar desarraigados
y con pudorosa inercia besarnos la ropa animalizados
